Un total de 7.483 trabajadores resultaron afectados por ERE en Cantabria en los siete primeros meses de 2013

El número de trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo (ERE) autorizados en Cantabria asciende en  los siete primeros meses de 2013 a 7.483, lo que la convierte en la sexta comunidad autónoma con menos personas en esta situación, según datos provisionales del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.

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Sólo La Rioja, con 2.033 trabajadores afectados en  este mismo periodo por un ERE; Islas Baleares (2.147); Murcia (2.525);  Extremadura (3.384) y Canarias (6.274) presentan cifras más bajas que  Cantabria.

De los 7.483 trabajadores afectados en Cantabria por  un ERE en los siete primeros meses del año, 5.828 se vieron afectados por la  suspensión temporal de su contrato, 1.248 padecieron una reducción de jornada y  407 se vieron afectados por despidos colectivos.

Sólo en julio, 988 trabajadores fueron afectados por expedientes  autorizados en Cantabria, de los cuales 863 vieron suspendidos sus contratos, 65  sufrieron despidos colectivos y 60 reducciones de jornada.

ERE 3

DATOS NACIONALES

En el conjunto de España, el número de trabajadores afectados  por expedientes de regulación de empleo (ERE) autorizados por las autoridades  laborales o comunicados a las mismas bajó un 7,4% entre enero y julio en  comparación con el mismo periodo del año pasado.

En concreto, un total de 266.849 trabajadores se vieron  afectados por un ERE en los siete primeros meses del año, en contraste con los  288.268 trabajadores que estuvieron implicados en una regulación de empleo  durante el mismo periodo de 2012.

No obstante, el número de trabajadores afectados por despidos  colectivos se incrementó hasta julio un 6,4%, hasta sumar 49.381 trabajadores,  dato que contrasta con los descensos en un 10,4% y en un 9,1% de los  trabajadores inmersos en suspensiones de contrato y reducciones de jornada,  hasta totalizar, respectivamente, 163.556 y 53.912 afectados.

Los procedimientos de regulación de empleo  autorizados/comunicados descendieron un 8,6% en comparación con el mismo periodo  de 2012, hasta sumar 19,382 procedimientos, frente a los 21.213 de un año antes.  Las empresas afectadas, por su parte, sumaron 15.404, un 13,3% menos.

Del total de procedimientos, 18.047 contaban con acuerdo entre  las partes, un 7,2% menos que entre enero y julio de 2012, mientras que 1.335 se  efectuaron sin acuerdo, un 24,3% menos.

SEIS DE CADA DIEZ, EN UN ERE ECONÓMICO.

De los 266.849 trabajadores afectados por ERE en los siete  primeros meses del año, seis de cada diez, 161.577 trabajadores, se vieron  envueltos en un procedimiento por causas económicas.

Dentro de este apartado, los procesos en los que las empresas  alegaron pérdidas actuales afectaron a 68.377 trabajadores, mientras que la  disminución del nivel de ingresos o de las ventas afectó a 40.923 empleados.

La previsión de pérdidas utilizada por las empresas para  justificar un ERE afectó a 3.090 trabajadores y otros 204 se vieron inmersos en  este procedimiento por alegar la administración pública en la que trabajan o  trabajaban «insuficiencia presupuestaria».

De estos 204 trabajadores del sector público afectados por un  ERE económico, 152 fueron despedidos, 22 sufrieron reducciones de jornada y a 30  se les suspendió el contrato de trabajo.

Por otro lado, los trabajadores afectados por ERE de causas  técnicas sumaron 6.665 hasta julio, los afectados por causas organizativas  totalizaron 25.016, los de producción ascendieron a 72.108 y los de fuerza  mayor, 1.483.

La principal novedad introducida en la reforma del mercado de  trabajo en relación a los ERE es la eliminación de la autorización  administrativa anteriormente exigida para proceder a la realización de despidos  colectivos o de medidas de suspensión de contrato o reducción de jornada por  parte del empresario.

No obstante, la nueva regulación mantiene la necesidad de que se  realice un periodo de consultas con los representantes de los trabajadores, al  tiempo que se establece la intervención de la autoridad laboral para garantizar  la efectividad de dicho periodo de consultas, pero sin tener ésta carácter  decisorio.

La decisión última será, pues, la del empresario, y como en el  caso de los despidos individuales, si no se está de acuerdo, los trabajadores  tendrán que impugnarla por la vía judicial.

De los 266.849 trabajadores afectados por un ERE hasta julio,  63.364 proceden de empresas de 50 a 249 empleados, 39.018 forman parte de  plantillas de entre 10 y 24 trabajadores, 36.160 trabajaban en empresas de entre  de más de 5.000 personas y 30.301 son de empresas de 1 a 9 trabajadores.

En las empresas de 25 a 49 trabajadores se registraron 30.300  trabajadores afectados, y en las de 1.000 a 4.999 hubo 26.977 empleados inmersos  en un ERE.

INDUSTRIA Y SERVICIOS, LOS SECTORES CON MÁS AFECTADOS.

La mayor parte de los trabajadores afectados por ERE  autorizados/comunicados hasta julio provenían de la industria (253.013) y los  servicios (175.706). En la construcción, los afectados sumaron 50.442 y en la  agricultura, 4.152.

Los datos publicados incluyen en esta ocasión la información de  los procedimientos comunicados por las empresas a la autoridad laboral de  Cataluña entre enero y julio.

De hecho, por comunidades autónomas, las que registraron un  mayor número de trabajadores inmersos en regulaciones de empleo hasta julio  fueron Cataluña (48.082), Madrid (32.181), País Vasco (32.765) y Comunidad  Valenciana (24.384), mientras que La Rioja (2.033 afectados), Baleares (2.147) y  Murcia (2.525) fueron las que tuvieron a menos trabajadores inmersos en un  ERE.

 

Original de europapress.es

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